Cosmética casera: Purifica y regenera tu rostro con esta mascarilla en polvo casera para una piel lisa y sin arrugas

La cosmética casera es cada vez la forma más elegida por aquellas personas que buscan mejorar su piel y darle un aspecto rejuvenecido sin la necesidad de procesos estéticos agresivos ni cirugías mayores. Además el uso de mascarillas naturales suelen ser más económicas y amables con el medio ambiente, sin dejar de lado su efectividad para borrar arrugas.

Si quieres lograr una piel lisa y sin arrugas, sigue leyendo pues en esta ocasión te traemos una solución perfecta: una mascarilla casera a base de arcilla y otros ingredientes naturales.

Esta mascarilla es ideal como tratamiento antiarrugas y lo mejor de todo es que todos tipos de piel pueden usarla, así que si tienes piel sensible o por el contrario muy grasa y aún así quieres una piel lisita, firme y libre de arrugas debes probarla.

¿Cómo preparar una mascarilla casera para alisar arrugas?

Para preparar esta mascarilla antiarrugas solo necesitas:

Arcilla blanca kaolín (puede ser rosa para piel sensible o verde para piel grasa)

Leche de coco en polvo

Polvo de rosas

Pantenol en polvo

Instrucciones:

Mezcla todos los polvos en un bol limpio hasta que estén bien integrados y ve agregando lentamente agua mineral o de rosas, mientras remueves, hasta obtener una pasta cremosa.

Aplica la mascarilla en tu rostro limpio, evitando el área de los ojos y deja actuar por 15 a 20 minutos, después njuaga con agua tibia y aplica tu crema hidratante favorita. Puedes usar esta mascarilla una o dos veces por semana para obtener los mejores resultados.

La arcilla blanca es uno de los ingredientes más conocidos en el mundo de la cosmética natural por sus propiedades desintoxicantes y suavizantes ya que es rica en minerales, con efecto calmante e pieles sensibles y también es capaz de absorber toxinas y grasas de la piel sin resecarla. Esto ayuda a desinflamar las áreas que presentan líneas de expresión, mejorando su apariencia y dándole un aspecto más firme y tonificado. Además, al estimular la circulación, favorece la regeneración celular, lo que se traduce en una piel más lisa y suave.