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Errores por los que tu suculenta se marchita y no debes repetir

Es importante que prestes atención en estos factores para evitar que se dañen.

Errores por los que tu suculenta se marchita y no debes repetir

Las suculentas son plantas que almacenan agua en sus hojas, tallos o raíces, lo que les permite adaptarse a ambientes áridos y sobrevivir en condiciones de sequía. Tienen una apariencia única y se han vuelto populares tanto en jardines como en espacios interiores, pero pese a todo a veces se marchita y esto tiene que ver con errores comunes que cometemos al cuidarlas.

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Ten en cuenta estos detalles para que crezcan saludables. Fuente. Archivo Panorama.

Uno de ellos tiene que ver con la ubicación que le damos en nuestros hogares. Cuando se colocan en el interior necesitan tener una importante cantidad de luz natural para mantenerse vivas y saludables. Ante esto siempre es mejor buscar un lugar en el exterior, para que reciban la energía adecuada o bien en sitios cercanos a ventanas para que nutran con los rayos del sol.

El segundo, y no menos importante, es el riego. Al tener la capacidad de almacenar agua en sus hojas, si la hidratamos muy a menudo es posible que se dañe. También hay quienes colocan muy poca agua en la maceta, lo que también afecta a la planta de manera importante, por lo que lo ideal es regar de manera abundante, pero no muy seguido.

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En este caso, lo ideal es regar semanalmente o cada 15 días, asegurándote de que la tierra esté seca al tacto antes de hacerlo. Al regar, vierte agua en la maceta hasta que el sustrato esté completamente húmedo. Esta frecuencia puede variar según el clima; por ejemplo, en verano podría ser necesario regar con más frecuencia, mientras que en invierno podrías espaciar más los riegos.

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Quedan bien en un centro de mesa, en las estanterías, en el baño, o incluso en la zona de oficina. Fuente: Archivo Panorama.

Aprende a reconocer las señales que indican si tus suculentas necesitan más o menos agua. Si las hojas se ven arrugadas o deshidratadas, es posible que necesiten más agua. Por otro lado, si las hojas se ven amarillas o translúcidas, pueden estar recibiendo demasiada agua.

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