¿No te rinde el dinero? Usa la naranja de esta manera para que tus ahorros crezcan y te duren

Abre los caminos para que el dinero llegue a ti con facilidad.

Nos encontramos en el último mes de diciembre y es común que en estos días busquemos diversos rituales para atraer eso que deseamos o aspiramos, como el dinero y la abundancia. Así, aquí en Panorama te hablamos de uno que te ayudará a que tu cartera siempre esté llena si lo haces con intención y fe, pues te abrirá los caminos para conseguir eso que deseas.

Y es que si el dinero es un problema en tu vida, pues el mismo no te rinde y llega a ser una preocupación importante de tu día a día, puedes hacer un ritual con una naranja que ayude para que esta situación cambie para el siguiente año, pues sin duda solo unas palabras bastarán para que tus ahorros crezcan y duren de la mejor manera.

¿Cómo hacer un ritual con una naranja para mejorar mis finanzas?

Este ritual es muy sencillo y con cosas que seguro tienes en casa. En caso de que no sea así, no te preocupes, ya que los materiales los vas a poder conseguir de manera muy sencilla y lo mejor es que lo mejor es que vas a decretar un mucho mejor futuro en tus finanzas para el 2025, lo que podrá cambiar tu vida de manera positiva y te ayudará a conseguir ciertas metas que tienes pensadas.

Los ingredientes que necesitas son los siguientes:

Mitad de una naranja
Romero (de preferencia seco)
Canela en polvo
Alcohol
Cerillos

Para hacer este ritual, vas a seguir los siguientes pasos. En primera instancia, vas a poner la mitad de una naranja en un recipiente. Luego vas a añadir las hojas de romero (si es seco es mucho mejor). Entonces le pondrás una pizca de canela en polvo y unas cuantas gotas de alcohol. Una vez que tengas todo, con mucho cuidado vas a encender un cerillo y vas a dejar que esto se consuma.

A la par de que haces esto, vas a recitar “Manantiales de infinita abundancia llegan a mi hogar. Atrayendo dinero, éxito y prosperidad. Hecho está”. Además, vas a poner el recipiente con la naranja humeando en tu sala y lo más cerca de la puerta de la entrada. Una vez que dejó de humear, vas a decir “Hecho está” y entonces ya vas a tirar la naranja a la basura.