Galilea Montijo revela su secreto para protegerse de las envidias y malas vibras

La conductora Galilea Montijo sorprendió al confesar su ritual personal contra las energías negativas.

Galilea Montijo revelando su ritual de protección espiritual
El ritual espiritual de Galilea Montijo contra las malas vibras FOTO: instagram @galileamontijo / adobe / freepik

En un mundo donde las energías se sienten y las envidias a veces se disfrazan de elogios, protegerse de las malas vibras se ha vuelto algo más que necesario. Muchas personas recurren a limpias, amuletos o incluso terapias alternativas, pero hay quienes han aprendido a blindarse desde su propio corazón.

Una de ellas es Galilea Montijo, quien en el programa Netas Divinas se abrió como pocas veces y compartió el ritual espiritual que ha practicado durante años para mantenerse fuerte, centrada y en paz, pese a críticas y ataques.

Lejos de rencores o rituales complicados, la conductora reveló que su mayor protección está en las palabras, en la intención y en una práctica tan poderosa como desafiante: bendecir a quienes le desean el mal.

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Galilea Montijo y el poder de las palabras como protección espiritual

En su más reciente intervención en Netas Divinas, Galilea Montijo habló desde lo más profundo de su lado espiritual. “La palabra es el conjuro más poderoso”, dijo con convicción. Para ella, el verdadero karma viene de lo que uno dice y desea a los demás.

La presentadora, quien ha sido objeto de numerosos comentarios y ataques en redes, confiesa que su protección más efectiva es la oración. Cada noche, antes de dormir, reza y envía bendiciones a quienes la han lastimado. “Es difícil, pero liberador”, afirmó.

Además, habló de su respeto por las energías y cómo ha aprendido a cuidar su campo espiritual. “Tú decides si dejas entrar la mala energía o no. Todo está en tu mente y en tu corazón”, compartió con honestidad.

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El tip más poderoso para limpiar la energía

Como buena tapatía, Galilea recordó que desde joven fue muy creyente del “mal de ojo” y que solía recurrir a la vecina del barrio para hacerse una buena limpia con huevos. “Me puse el moñito rojo aquí, para protegerme del mal de ojo”, dijo señalando la cabeza.

Pero con los años, evolucionó hacia prácticas más conscientes, donde la intención y el deseo del bien han sido claves. “Bendecir a quien te hace daño es un acto de amor propio, de sanación y de fortaleza”.

Advirtió que hablar mal de los demás sólo contamina nuestra propia energía. “Cuando tú estás feliz, no hablas mal de nadie. No necesitas hacerlo porque estás en paz”.

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Roxette Ramírez

Soy profesional de la comunicación, especializada en imagen y estilismo de moda. He trabajado como periodista y content manager en temas de actualidad, moda y estilo de vida.

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