Príncipe William y Kate Middleton conquistan nuevo poder en la monarquía británica

Mientras el rey Carlos III sigue enfrentando retos de salud, el príncipe William y la princesa Kate Middleton han ido consolidándose como las figuras clave que liderarán la monarquía en un nuevo capítulo más moderno y eficiente, algo que ha causado un gran impacto entre su público seguidor.

Desde el diagnóstico de cáncer de Carlos III en febrero de 2024, sus apariciones públicas cayeron de más de 200 compromisos en 2024 a menos de 50 en 2025, lo que ha obligado a Guillermo a asumir cerca del 80 % de las obligaciones reales este año.

La princesa de Gales, por su parte, a pesar de completar su tratamiento contra el cáncer, ha retomado gradualmente sus compromisos, pasando de 120 actos en 2023 a los 20 planeados para 2025. Así, al matrimonio se les otorgó la facultad de dar órdenes reales que es una redistribución de tareas anticipa la inminente sucesión y coloca a la pareja en el frente de la institución.

El poder de Kate Middleton y el príncipe Harry

Catalina hará historia en 2026 al convertirse en la primera Princesa de Gales en otorgar Royal Warrants en 115 años, una prerrogativa que le permitirá avalar públicamente proveedores de bienes y servicios al Palacio, de acuerdo con la información del medio The Guardian. Esta atribución, reservada a la realeza desde 1910, no sólo simboliza su creciente estatus, sino que también alinea sus funciones con la promoción de la industria británica y la creatividad.

Con esta responsabilidad, Kate impulsará la industria nacional: diseñadores como Alexander McQueen o joyeros como Kiki McDonough podrían beneficiarse del impacto que su aprobación genera, también conocido como el “Kate Middleton Effect”. Esta expansión oficial de su rol es una muestra de la confianza del Palacio y del rey en su liderazgo económico y cultural.

El “power duo” de la diplomacia

William y Kate ya están actuando como un equipo de liderazgo global. En temas diplomáticos, su poder de convocatoria ha sido calificado como “único” por su capacidad de atraer atención y revertir tensiones, como ha ocurrido con líderes internacionales como Donald Trump.

Durante este 2025, William ha intensificado su agenda: ha liderado viajes internacionales, decenas de reuniones clave sobre política exterior y toma de decisiones relacionadas con el patrimonio del Ducado de Cornualles, lo que fortalece la economía real y refuerza su perfil como estadista.

El duque está reorganizando la Casa de Gales: seleccionando un equipo reducido y confiable, que le permitirá actuar con agilidad en defensa de causas como el medio ambiente, la infancia y la salud mental. Se espera un enfoque más directo y eficaz, evitando el ceremonial innecesario.

De esta manera, el ascenso de William y Kate ha supuesto una transición silenciosa pero firme hacia una monarquía moderna. Con la experiencia de Charles como base, la pareja se proyecta como representantes de una institución adaptada al siglo XXI: más frugal, auténtica y centrada en causas con impacto real. El lanzamiento de la “tríada de liderazgo”, Carlos, William y Kate, simboliza esta transición.