¿Ganó algo con el video viral? Esto obtuvo la fan de Coldplay tras grabar la infidelidad de Andy Byron

Esto fue lo que realmente obtuvo la fan que grabó el beso incómodo en el concierto de Coldplay.

Foto:TikTok@instaagraace

Mientras miles de personas disfrutaban del show de Coldplay en el Gillette Stadium, una asistente grabó —sin imaginarlo— uno de los momentos más incómodos del evento: una pareja demasiado cariñosa captada en la kiss cam… y que, según Chris Martin, parecía estar escondiendo algo.

La autora del video viral es Grace Springer, de 28 años, quien estuvo presente en el concierto del pasado 16 de julio y, con el celular en mano, terminó siendo testigo de lo que muchos interpretaron como una infidelidad en vivo. “Tenía mi cámara lista porque me encanta capturar momentos, además de que esperaba salir en la pantalla”, explicó Grace esta mañana durante su aparición en el programa británico This Morning.

Lo que grabó, sin querer, fue algo completamente distinto: Chris Martin señalando a una pareja que rápidamente se separó al sentirse observada. “Whoa, miren a estos dos… o están teniendo una aventura o son muy tímidos”, bromeó el cantante, mientras más de 50,000 personas reaccionaban en el estadio y millones en TikTok lo viralizaban en cuestión de horas.

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De la viralidad al escándalo corporativo

Tras difundirse el clip, los protagonistas del incómodo momento fueron identificados: Andy Byron, CEO de la empresa Astronomer, y su jefa de recursos humanos, Kristin Cabot. El problema: Byron está casado con Megan Kerrigan Byron, quien no tardó en eliminar su apellido de sus redes sociales y luego desaparecer por completo de Facebook.

La polémica explotó como pólvora, y el video —que ya ha sido replicado hasta por celebridades como Sofia Richie Grainge— se convirtió en el ejemplo perfecto de cómo la viralidad no respeta la privacidad, ni siquiera cuando ocurre entre la multitud.

¿Y Grace? Mucha fama, cero dinero

Aunque la publicación convirtió a Grace Springer en “la chica que grabó el video”, la realidad es que no ha recibido ninguna retribución económica. “No he ganado ni un dólar. El video no está monetizado”, declaró. Eso sí, también afirmó que no se arrepiente: “Siento mucho lo que ha pasado con la esposa y la familia de Andy, pero yo no fui la única que lo grabó. Si no lo hubiera subido yo, alguien más lo habría hecho”.

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A veces, estar en el lugar y momento exacto te convierte en viral… pero no necesariamente en millonaria. Y mientras la historia sigue dando de qué hablar, Grace regresa a su vida con una anécdota que jamás olvidará y cero cheques en el buzón.

¿Hasta dónde llega la responsabilidad de quien graba un momento viral cuando la verdad ya estaba expuesta frente a miles?

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Karla Talavera

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