Familia Real
Meghan Markle lleva flores a las víctimas del tiroteo de Texas
La esposa del príncipe Harry apareció en Texas para dejar una ofrenda a los niños muertos a causa del tiroteo de Uvalde
La duquesa de Sussex fue captada este jueves dejando un ramo de flores en el monumento que se ha colocado en honor a las víctimas del lamentable tiroteo que ocurrió, recientemente, en una escuela de la ciudad de Texas, en Estados Unidos. Esto ocurre pocos días después de que su papá fuera internado de gravedad tras un derrame cerebral. Meghan Markle no ha ido a ver su padre y se dice que no tiene intenciones de hacerlo.
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Meghan Markle viaja a Texas para estar con los padres de los niños del tiroteo Texas
La duquesa de Sussex colocó una ofrenda floral frente al juzgado del condado de Uvalde, cerca de donde Salvador Ramos disparó contras niños de la escuela primaria Robb este martes. Las rosas estaban envueltas, cuidadosamente, con una cinta morada y las puso junto a una cruz para Uziyah García, de 10 años, que decía: "Se te extrañará", según el diario “The Los Angeles Times”.
Meghan Markle apareció usando un par de jeans con una camiseta gris holgada, gorra a juego y un par de tenis Smith de Adidas. También usó el reloj Cartier Tank de 23 mil euros de la princesa Diana y un brazalete Cartier Love, según el “Daily Mail”.
El papá de Meghan está grave en el hospital
La aparición de Meghan en Texas se produce después de que su padre fuera hospitalizado de emergencia tras de sufrir un "derrame cerebral importante" hace una semana. Según fuentes cercanas a la realeza, se dice que la duquesa no tiene intención de visitar a su padre, quien durante años ha tratado de mantener comunicación con ella.
Se espera que la duquesa de Sussex vuelva aparecer pronto junto a la familia real, ya que se sabe que en menos de una semana estará viajando a Londres para sumarse a los festejos por el Jubileo de Platino de la reina Isabel.
¿Qué ocurrió en Texas?
Salvador Ramos, de 18 años, mató a 19 niños y dos maestras en una primaria en Uvalde. Entre los primeros reportes, se dice que el agresor sufría de bullying y su madre aseguró a las autoridades que su hijo “no era un monstruo”, aunque podía ser “agresivo”. Las muertes de estos menores de edad conmocionaron al mundo entero y han vuelto a poner en evidencia el problema que tiene Estados Unidos en materia de tiroteos escolares.
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